COMO AYUDAR A UNA PERSONA CON DEPRESIÓN
Cómo ayudar a una persona con depresión
Indice
La depresión es un trastorno que afecta a gran cantidad de personas en el mundo entero y la gran protagonista de las clínicas de todos psicologos y psiquiatras. Se caracteriza por una gran tristeza, fatiga, apatía, insomnio o hipersomnia, pensamientos negativos y desesperanzadores. Cuando alguien de nuestro entorno está pasando por una depresión nos preguntamos qué podemos hacer para ayudarle, cuál es la mejor manera de actuar cuando le vemos en “el pozo” y cómo gestionarlo nosotros mismos. Es por eso que en el artículo de hoy trataremos sobre cómo ayudar a una persona con depresión.
Antes que nada, debemos diferenciar la depresión de la tristeza natural y adaptativa del ser humano que aparece ante los eventos inevitables de nuestra vida que nos hacen sufrir, como un duelo o una pérdida de algo importante. A continuación enumeraremos una serie de recomendaciones cuando un ser querido está lidiando con la depresión.
Orientar a la persona con depresión hacia cambios y soluciones
Las personas con depresión suelen sentirse atrapadas por su malestar, pensamientos y emociones que fácilmente empujan a la baja actividad vital, y dar vueltas a aspectos negativos de sus vidas. Es importante ayudarles a enfocar sus energías en cambios que puedan dar lugar a mejoras en su calidad de vida y satisfacción personal. De este modo, algunos consejos para lograrlo son los siguientes:
Conseguir que pida ayuda
Cuando detectemos que una persona de nuestro círculo tiene depresión puede ser crucial que consigamos motivarle para que acuda a un profesional para salir de la depresión. La terapia y los mecanismos que se inician con ella son vitales para superar este estado además de promover un espacio para que la persona se sienta escuchada y apoyada.
A menudo nos preguntan cuál es la mejor manera de planteárselo a esa persona que no se encuentra bien. Pues bien, nuestro consejo es tener una charla tranquila, desde la sinceridad, desde el amor y la comprensión. Podemos explicar cuánto nos preocupamos por cómo se siente y plantear juntos iniciar un proceso de búsqueda de ayuda. En ocasiones, la situación de una persona que está deprimida puede producir enfado e incomprensión en las personas que le rodean así que es necesario poner especial cuidado en que sea una conversación sin reproches, desde la preocupación por el otro en vez desde esas emociones de desesperación que podemos sentir ante ello. También podemos preguntar sobre sus miedos ante la terapia o que piensa al respecto para que, así, haya un clima de confianza que ayude a que nos tenga en cuenta durante todo el proceso.
Ayudar pero no reforzar las “conductas de enfermo”
Es importante señalar que la depresión es una dificultad psicológica muy limitante pero no debemos caer en reforzar demasiado las “conductas de enfermo” (estar en cama, no participar, no autocuidarse…). Puesto que partimos de la base que la persona tiene en sus manos el poder de recuperarse y poner en práctica herramientas que le ayuden a “poner a dieta” a la depresión y, si nosotros, cada vez lo tratamos más como un enfermo no ayudaremos a su mejoría. Un ejemplo de esto podría ser no suplirle, en la medida de los posible, en tareas básicas o cotidianas como las del hogar o de autocuidado.
Apoyar la activación conductual
La activación conductual se define como activarse para hacer competencia a la tristeza y a la pasividad. Se ha demostrado que es una técnica psicológica con una gran potencia en la depresión. Activarse puede ir desde dar un pequeño paseo hasta retomar aquellas cosas que nos gustaban y se han quedado relegadas por la depresión.
Los familiares y personas allegadas a alguien con depresión debemos conocer que esto es algo positivo y motivar a la persona a que siga este camino, sin presionar, pero empujando suavemente a que haya pequeñas metas y se vayan cumpliendo. Además, reforzar cualquier avance es algo muy positivo en el tratamiento de la depresión. Que nuestros seres queridos nos muestren una sonrisa o nos digan lo orgullosos que están cuando hacemos algo es un premio muy potente así que podemos utilizarlo para aumentar los comportamientos que se haya planificado que son buenos para la persona. Hay que movilizar a la persona utilizando el cariño, nunca el reproche o el enfado.
Mantenernos interesados en todo el proceso terapéutico
Preguntar sobre lo que quiera compartir de las sesiones y de su proceso y metas acordadas puede ayudar a que se adhiera a la terapia y sienta que no está solo en los pasos que da.
Estar presentes en el proceso también puede ser importante para valorar los posibles cambios que veamos o para elogiar avances. También estar atentos puede ser necesario para dar información valiosa al terapeuta , si fuera necesario. En ocasiones el terapeuta puede requerir algo de las personas cercanas al paciente así que mantenernos atentos a los cambios puede ser de ayuda.
Cómo tratar a una persona con depresión
Ver a un ser querido con depresión suele resultar doloroso para las personas que tratan de ayudarle. En ocasiones, no se sabe bien qué decir, cuesta comprender hasta qué punto está limitando el estado depresivo a la persona. Las propias emociones pueden dar lugar a la desesperación y tener una actitud que puede tener efectos contraproducentes. En otras ocasiones, el no saber qué decir, o lo que uno cree que debería hacerse, pueden ser causas de un enfriamiento con la persona depresiva. Algunas recomendaciones en este sentido son:
Validar su sufrimiento
Cuando las personas se sienten deprimidas a veces encuentran mucha crítica en el entorno. Muchas personas no entienden porqué están así y les “culpan” de la situación que viven. La visión que tenemos en psicología de la depresión pone hincapié en la responsabilidad del paciente en su trabajo contra la depresión pero hay que tener especial cuidado en transmitir esto. Motivar hacia cambios o cosas nuevas no debe estar reñido con un clima de validación. Un clima en el que la persona que tiene depresión sienta que se trata su tristeza como algo real y muy pesado que le acompaña. Hacerle ver que entendemos que debe ser duro seguir con todos esos síntomas que “le han caído encima” y que creemos que es muy valiente por seguir adelante a pesar de ellos. Que las personas sintamos que dan cabida a lo que sentimos crea un ambiente de confianza y expresión emocional que es muy bueno para ayudar a una persona con depresión.
Validamos la emoción pero nos centramos en cosas valiosas.
Hemos comentado la necesidad de hacer que la persona se sienta comprendida pero hay que tener cuidado con centrarnos demasiado en la depresión y los síntomas en las conversaciones. Hemos observado que los pacientes con depresión utilizan el dar vueltas a la cabeza para aliviarse e intentar encontrar una salida a su sufirimiento pero, paradójicamente, esto sólo lo aumenta a largo plazo. En ocasiones hacen el mismo proceso con alguien de confianza y, si somos nosotros, debemos tener cuidado de no centrarnos sólo en eso y llevar nuestras energías a cosas que son valiosas para el paciente y para la relación. Podemos apoyarnos de frases como: “ya veo que lo estás pasando fatal pero parece que por más que hablemos de ello esa preocupación sigue por aquí. ¿Y si dejamos el tema un momento aquí al lado y nos centramos en contarnos como ha ido el día?” De esta manera le escuchamos y validamos pero no dejamos que toda la preocupación y tristeza contamine cada interacción.
Cuidado con los consejos.
En muchas ocasiones, cuando uno no padece depresión y lo ve todo desde fuera puede parecer inverosímil esa situación (aún más cuando parece que no hay motivos aparentes) y esto produce que caigamos en consejos vanos que, aunque con el fin de ayudar, no producen más que dolor en la otra persona. Comentarios del tipo: “anímate” “no es para tanto” “hay gente que lo pasa peor en la vida”… son consejos que a la hora de cómo ayudar a una persona con depresión producen muy poco efecto e, incluso, contraproducente. Cabe señalar que la sensación y pensamientos de culpa son altos en un cuadro depresivo y sentir que no pueden poner en práctica esos sencillos consejos o que “no deberían quejarse” producen un sufrimiento añadido.
Otros factores a los que estar atentos:
Ayudar a una persona con depresión suele ser un proceso difícil. En ocasiones uno puede dejarse de lado, haciendo todo lo posible por que la persona que se quiere logre mejorar y estar bien. Existen también algunos factores relacionados con la depresión a los que es importante tener en cuenta.
Estar pendientes de la desesperanza
Aunque es una realidad muy dura el suicidio es algo que está muy presente en nuestra sociedad y tiene una relación con la depresión y, en concreto, con la desesperanza. Como personas allegadas podemos estar pendientes de un agravamiento del estado de la persona o de cualquier indicio que nos parezca reseñable y ponerlo en conocimiento de un profesional. Informarnos con alguien experto puede ayudarnos a saber identificar algunos puntos que podrían ayudarnos a indentificar este estado y ayudar a esa persona en este momento tan delicado y de tanto sufrimiento.
Cuidarse a uno mismo
En ocasiones estar cerca de alguien que padece depresión crea un clima que es contagioso. No es raro encontrar cónyuges o hijos de personas deprimidas encontrándose también muy tristes y agobiados. Siempre recomendamos estar ahí para la persona que lo padece pero siempre cuidándonos a nosotros mismos. Respetando y manteniendo las cosas que nos gustan, dándonos un descanso cuando sea necesario, socializar con otras personas y ,si es necesario, consultar también con un psicólogo.
La depresión es dura para el paciente y para los que la sufren a su alrededor así que podemos concluir en la importancia de crear un clima de expresión emocional, motivación a la accion y cuidarnos a nosotros mismos. De esta manera tendremos muchas más herramientas para ayudar a esa persona importante a vencer la depresión.

Joan Rullan Pou
Psicólogo experto en Terapias Contextuales. Apasionado del desarrollo científico en Psicología. Si te sientes identificado con nuestros artículos, no dudes en contactarnos.
Dejar un comentario
¿Quieres unirte a la conversación?Siéntete libre de contribuir