Discalculia | Síntomas y cómo corregirla
La discalculia es uno de los trastornos específicos del aprendizaje que afecta a la adquisición de los conocimientos aritméticos básicos (suma, resta, multiplicación y división) y, en menor medida, al álgebra o la aritmética.
Según cómo se gestione, puede conllevar dificultades añadidas en relación a la competencia percibida por el menor, pudiendo afectar a la confianza y autoestima de los niños.
Qué es la discalculia
Indice
La discalculia no solo produce interferencias en el rendimiento académico, sino que también afecta a las actividades de la vida cotidiana que requieren habilidades para las matemáticas. Por lo tanto, algunos síntomas de la discalculia pueden presentar dificultades en distintas áreas:
- Para recordar números de teléfono, códigos postales o puntuación de juegos.
- Relacionadas con el manejo del dinero, como contar dinero o calcular el cambio.
- A la hora de estimar la longitud de las distancias y el tiempo que tardarán en llegar de un lugar a otro.
- Diferenciar la izquierda y la derecha.
- Leer los relojes y decir la hora.
Esta dificultad del aprendizaje presenta un origen neurobiológico, y no está provocada por problemas de atención como el caso de niños con TDAH, ni intelectuales o carencias en el ámbito escolar.
Hay que señalar que no todas las dificultades relacionadas con las matemáticas se corresponden con un caso de discalculia, ya que existen otros factores que pueden afectar a la capacidad del niño para resolver de manera satisfactoria los diferentes ejercicios matemáticos.
Síntomas de la discalculia
A continuación, se presentan los síntomas que suelen darse en niños con discalculia. No en todos los niños aparecen todos los síntomas,y estos pueden ir variando en función de la edad:
Dificultades con los números
- Dificultades relacionados con los números:
- No se identifica el número, por lo que presentan dificultades en el dictado de números.
- Se confunden en la copia de los números que se parecen de forma gráfica (6-9). Esta confusión también se puede dar con los signos de la suma y de la multiplicación.
- Aparecen desorientaciones espaciales (se escribe el número 3 pero invertido hacia la derecha).
- Se producen errores en la posición de los números (37-73).
- Dificultades relacionadas con seriaciones:
- Repiten números en una serie (34 – 35 – 36 – 36 – 37 – 38).
- Cambia el orden de los números (26 por 62).
- Omite algún número (10 – 20 – 30 – 40 – 60 – 70).
- Altera el orden de la serie y se intercala un número que no corresponde (34 – 35 – 36 – 48 – 37 – 39).
- Dificultades relacionadas con las operaciones:
- Iniciar la suma de izquierda a derecha.
- Mezclar las unidades con las decenas, las decenas con las centenas, etc.
- Se cometen errores en la forma de colocar en columna los números para realizar las operaciones.
- Errores generales de sumar, restar, multiplicar y dividir.
Dificultades de relación y comprensión
- Dificultades relacionadas con los problemas:
- No comprenden el enunciado o realiza una interpretación parcial del mismo.
- Le cuesta obtener la percepción global del problema, y dirige su atención a partes o a operaciones concretas del mismo.
- No tiene adquirida de forma adecuada los automatismos que requieren las operaciones matemáticas.
- Dificultades relacionas con la memorización:
- No puede recordar una sucesión temporal de números.
- Presenta dificultades en la noción “antes y después”.
- Dificultades relacionadas con las representaciones gráficas:
- Presenta dificultades para representar un conjunto mediante un diagrama.
- Presenta dificultades para entender las gráficas.
- Dificultades relacionadas con la asociación objeto-número:
- No es capaz de realizar de manera adecuada la correspondencia entre un objeto y un número.
- Dificultades relacionadas con el conteo:
- El conteo se produce de forma mecánica, pero no comprende el número.
- Conservación:
- No hay una adecuada interiorización de que una cantidad determinada puede adoptar distintas formas sin perder su valor. Por ejemplo, si se le presentan dos peras y, posteriormente, se parten por la mitad y se le pregunta cuántas peras hay, responde que hay más de dos.
- Cálculo mental:
- Presenta dificultad para realizar cálculos mentales sin ningún apoyo, de acuerdo con el nivel que tiene que tener el niño.
Cómo corregir la discalculia
Igual que vimos al cómo abordar la dislexia, existen actividades académicas que se pueden llevar a cabo para trabajar los síntomas de la discalculia:
- Entrenamiento en conceptos básicos como: todo-nada, mayor-menor, más-menos, algo-poco, grande-pequeño, quitar-poner, antes-después, ahora-luego, hoy-mañana, clasificar, fila, columna, asociar, emparejar, igualar, completar, repartir.
- Números y seriaciones:
- Formar filas de números de mayor a menor y de menor a mayor.
- Completar y seguir series ascendentes y descendentes.
- Comparar números.
- Ejercitar la correcta audición de números con sonidos similares.
- Ejercicios en los que se discrimine entre distintos números y distintos signos.
- Operaciones:
- Ejercicios de esquema corporal en los que se trabaje la derecha y la izquierda.
- Tareas donde tenga que practicar la correcta posición de los números en columnas (las unidades debajo de las unidades, las decenas debajo de las decenas, etc.)
- Prácticas donde tenga que distribuir de forma gráfica los números (se dibujan cuatro o cinco columnas con líneas verticales y el niño tiene que ir distribuyendo los números por ellas).
- Dibujos geométricos:
- Dibujar figuras geométricas sencillas para ir aumentando la complejidad de las mismas.
- Resolución de problemas:
- A la hora de plantear un problema, hay que tener en cuenta que deben ser cotidianos, sencillos, que se puedan representar gráficamente, y que se adapten al nivel de cálculo que posee el niño. Si no existe un adecuado dominio de escritura, se deben presentar de forma oral.
Ejercicios para corregir los síntomas de la discalculia
- Cálculo mental:
- Se debe explicar al niño cada paso que hay que seguir para realizar la operación mental y, paralelamente, ir escribiendo y verbalizando cada paso mientras se resuelve el cálculo. Se puede utilizar algún tipo de material complementario como objetos, fichas, etc.
- Memorización:
- Presentar fichas con números para que el niño los observe durante un tiempo determinado y que luego sea capaz de recordar qué número había en la ficha.
- Dibujar figuras geométricas sencillas, retirarlas y, luego, que las reproduzca.
- Signos de operaciones:
- Realizar ejercicios donde tenga que emparejar mediante flechas los signos con sus respectivos nombres.
- Presentar un gran número de signos y que rodee aquel que se le indique.
- Representar operaciones sencillas y que el niño ponga el signo adecuado.
- Equivalencia:
- Se le presentan al niño distintos objetos: billetes, juguetes, frutas, etc., para que trabaje los distintos tipos de equivalencias.
- Razonamiento lógico y numérico:
- Realizar ejercicios con cartas o juegos de cartas.
- Realizar distintos tipos de ejercicios con el dominó o juegos parecidos.
Conclusiones
Los niños con discalculia son conscientes de las dificultades que presentan, y de la poca compensación que tiene el esfuerzo que realizan, por lo que son muy sensibles al fracaso.
Por este motivo, frente a los síntomas de la discalculia, se han de potenciar los refuerzos positivos frente a los logros conseguidos, y motivarlos mostrándoles que tienen aptitudes para otras materias, y que con la ayuda de un profesional de un psicólogo infantil podrán superar sus dificultades.

Joan Rullan Pou
Psicólogo experto en Terapias Contextuales. Apasionado del desarrollo científico en Psicología. Si te sientes identificado con nuestros artículos, no dudes en contactarnos.